LA
LOBA SAGAZ
En
la vida no siempre intentamos dar algo para recordar y mucho menos nos
empeñamos en hacer un esfuerzo.
Una
de las vidas con tanto mensaje para mí ha sido esta, pues en ella se desatan problemáticas
por las cuales se lucha día a día, incluso contra nuestras convicciones, lo que
hemos creído, lo que nos han enseñado, lo que nos imponen lo que quieren de
nosotros.
Me
ha causado sin fin de sentimientos, el mayor “impotencia” al ponerme en su
lugar; he pensado qué hubiese pasado si ella desafiara, el no hacer caso ante
aquellas acusaciones y descubro la verdad de esto...
Entiendo
su temor, pero ni ello acaba con la pasión que siente, sino aumenta más,
incluso ante la demanda del arzobispo, de los “lobos” como ella los llama,
aquellos que la asechan logrando su fin, arrebatarle lo que más amaba en la
vida, más bien quitarle la vida, porque eso eran los libros para ella ¡Acaparaban
su mundo! El saber, el nunca terminar de saciarse, el siempre querer más,
anhelar, pues eran toda su confianza…
Nunca
se deja de aprender en la vida hablando de sabiduría y en vivencias ella tuvo
una vida así, llena de buenas y malas experiencias, el no tener padre ni tener
las mismas oportunidades, pero no por eso se negaba a la oportunidad de saber
más cada día...
Podré
pensar que ella tuvo un don, un don muy grande que supo aprovechar hasta el
último de sus días y claro alguien que estaba segura de que era capaz, que lo
demostraba al hablar, en su manera tan segura de caminar, su mirada, llena de
certidumbre lo podía afirmar.
¡Fue
tan valiente! Sus escritos que reflejan su desesperación “La injusticia tomada
por lo que se creía justicia”. La loba, como ella misma se menciona, termina
siendo ella, por su sutileza, por saber engañar a los que quisieron engañarla,
ellos terminaron siendo unos corderos dóciles; de algún modo se salieron con la
suya, pero sin embargo, dio fin victoriosamente en el impreso de sus obras.
Apartarse
de sus pertenencias no debió ser fácil tuvo grandes conocimientos, a partir de
ello descubrimiento, su sabiduría dependió de ello, el placer con el que lo hacía
se ve al escuchar cada una de sus obras.
Juana
Inés hubiera podido vivir algún amor o
romance, con respecto a su posible amor por
su entrañable amiga, reflexionó y
no puede ser un acto descartado ya que en ella pudo encontrar el apoyo siempre
fiel de su amiga, la lealtad, la complicidad... que en un hombre no podía encontrar.
Sabiendo
que no era culpable la acorralaron le exigieron ceder, fue una humillación tan
grande, al menos a mi punto de vista, puesto que sabiendo lo talentosa que era,
deciden quitarle ese puesto que solo ella se merecía ¡Nadie más!
Firmó
a sangre, una culpabilidad falsa y si eso fuese culpa, ella hizo lo que es
correcto, esa forma que uno entrega la vida por lo que más ama; apreciándolo en
mi vida, fue un acto de sacrificio, un acto de valentía, no de temor, no de
cobardía, hizo tanto que continuará viviendo en la historia y nosotros la
recordaremos hasta que tengamos memoria...
Quería
la libertad, eso era lo único que ella esperaba respetarse, creo yo que no por
ser hombres tenían más derecho, mucho menos me pareció tan caballeroso no
aceptar a alguien que muchas veces les demostró lo capaz que era y que incluso
ellos mismos se habían asegurado que era así. En ese tiempo no fue así, no les
convenía que una mujer fuera más lista que ellos prefirieron callar la
inteligencia memorable de esa mujer más sabia que ellos...
Pienso,
por una parte, que Juana Inés tuvo grandes oportunidades, suerte o no sé cómo
he de llamarle... ¡Destino! Ya que la había elegido, su personalidad, su
capacidad, su inteligencia era apta, ese era el camino marcado, me atrevo a decir
una creación perfecta, tal vez no fue tanto el que haya enfermado, sino que ya
no tendría más consigo, todo lo que le originaba la vida.
Su
vida estará llena esta de grandes misterios que podemos no imaginar que incluso
años de estudio nos descifrarían toda la verdad...
En
la vida hay tan grandes historias de personajes reconocidos e irreconocidos que
podemos asimilar a la vida de Juana, pero al menos en mi caso no me he
esforzado por obtener siquiera un
minúsculo del conocimiento que ella tuvo, los retos que ella se imponía no los
he puesto en práctica, bueno no al grado que ella los hacía, quizás el destino que
como mencionaba los ha escogido pero tampoco tengo la certeza que así sea ni
mucho menos que piense que no pueda lograrlo, todos tenemos diferentes
capacidades y somos aptos para diferentes cosas...
Eso
me da una esperanza el día de hoy, porque al menos no tengo la lucha que ella
tuvo, pero la lucha que tengo que enfrentar es conmigo misma la pereza por que
tan solo es eso todos somos capaces pero somos muy flojos para pensar, actuar, y
mucho más para cumplir las cosas, la misma la sociedad y el medio en que habito
dependen que acabe con lo que deseo, pero eso solo depende del éxito que ponga
en mí.
Me
gustó esta obra no ha faltado nada, sino que ha sobrado todo, todo lo que se
puede obtener de riqueza literaria, eso que la autora narra cada detalle y el
sentimiento que se apropia de la historia. Recomiendo esta obra, es un ejemplo
que marca nuestra historia, un acontecimiento que no puede pasar desapercibido
y que te adentra desde la niñez, las aventuras, el desfalco y todo lo que tiene
que ver con la vida misma, la décima musa. Pensar en un título resultó difícil
y no pude descifrar otro que cumpliera mi concepto para poder describirla.
6B
HORTA PARRA BETZABEE